Este es el viaje que emprendió una flor, buscando sus raíces y nutrirse del sol.
Un viento del sur la traslado a Colombia, con sonidos del güiro recordó a sus abuelas bailar y movió sus pétalos a reventar.
Varios días adornando las tamboras vivió.
Tan linda era la flor, que el mar caribe se enamoró, ella felizmente en sus aguas claras y mareas fuertes floto. Varios pececitos le contaron que era la costa más linda que existió, tanto que vírgenes bajaban a sentir su calor.
Gustosa estiro sus raíces en la casa de San José, la flor feliz de crecer en una tierra donde las montañas abrazan los días, la gente se alegra y comparte sonrisas.
Los movimientos de enaguas al son del folclor le hicieron pensar, y parar de rodar.
El sonido del hip hop que el viento callejero le acerco, le hizo probar las mil formas de girar, pero aun no encontraba su lugar. Dejo que el ritmo le vibrara en el centro del interior y se elevó. Subió y subió, donde San Rita con sus fiestas la resguardo.
Un pueblo de maíz y resistencia la dejaron llena de luchas. Colores morenos, mezclas diversas, de corazones infinitos combinaron sus andanzas con sabores de cumbias rebajas.
La vida viene y va, y la flor volvió a bajar.
Ponchita la vidente le confirmo que su vida era viajar. Su misión era explorar, aprender junto a sus maestras la Quena y Zampoña que la mantuvieron despierto su andar.
Esta flor por España, Canadá y Reino Unido paseo, llenando sus células de historias y color.
No existe final en una historia pigmentada, de un viaje a corazón abierto que en vez de raíces encontró movimientos curvos por la música, permitiéndose probar y trotar el mundo sin parar.
supported by 5 fans who also own “Cumbia de las Flores”
Just like Alice in Wonderland, you go off the beaten track only to transcend into a different world and discover treasure. This hidden gem is true artistry! mhg_ntombela